viernes, 6 de agosto de 2010

Willkommen



Hola. Recién hoy, luego de unas doce horas de sueño puedo empezar a reaccionar. Todavía no me siento muy en Alemania. Se debe, tal vez, a que mi recuerdo siempre fue blanco, nevado. Tal vez a que adeudo aún laburos porteños que próximamente saldaré. Ya hice todo lo que debía hacer a las primeras horas de Berlín (por lo cual me puedo volver): dönner (comida turca), cerveza, hacer 5 transbordos de subte en un recorrido de 15 minutos, comer el famoso franfurto con mostaza, pisar el postdamer platz, una suerte de florida pero con otra arquitectura cuanto más interesante. Bien hasta aquí la germany. La pregunta que surge es: abrir un nuevo mar? seguir este? Veremos. En la semana toca una campus de tango, tangosafari, donde voy a dar clases de cetaceo. Ayer tuve la primera noche berlinesa. Calorcito. Unos veinte y pico de grados, caminando por Prenzlauer Berg, una mezcla de San telmo y Palermo, todo el mundo con sus cervecitas y bicicletas andando por la calle. No sé si el aire tenía una felicidad o era mi sensación, un poco incerta empero, que inundaba todo de felicidad. Lo incierto es el porqué de acá, el para qué. La noche me arrastraba y uno se va con ella.
La foto? Mis primeras palabras serias en alemán fueron a una chica que pedía ayuda para rescatar no sé que osos en extinción. De una de las tantas fundaciones de animales. Por eso, y por el multikulti de Berlin, el saludo ballenero de bienvenida.

3 comentarios:

  1. eaaaaaaaa eaaaaaaaaa

    prenzlauer berg, bici y cerveza es la combineta de la gloria!

    bienvenido a la iurop, tomás joaquín, alle am besten (?)!!!!!

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  2. Boludo no te llame! Soy lo menos... Te mando un beso grande amigooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!

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  3. quedate tranquila. evita siempre esta en mi corazon

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